LO PEOR DEL MUNDO
¿Qué tal?... Soy un ciudadano
común y corriente; Mexicano, Coahuilense y Saltillense orgullosamente. Alguna
vez leí en una pagina de internet que en mi vida pasada me había llamado
Khnemu; en realidad no se que sea ni que signifique pero así me voy a
identificar por ahora como Khnemu.
Sentí
la necesidad de expresar mi sentir de la manera en la que se. No soy bueno hablando
y tal vez tampoco lo sea escribiendo; pero de esta ultima me siento mas cómodo
al momento de comunicarme.
Tengo
una hermana que es 7 años menor que yo a la cual quiero mucho. Cuando estábamos
viviendo juntos en casa de mis padres, ella siempre tuvo miedo. La casa era
grande, tenia 2 pisos, un patio grande y
las habitaciones eran amplias. Las habitaciones quedaban en la parte de arriba
y abajo estaba la sala-comedor, la cocina y otra habitación que mi madre usaba
para poner sus libros y esas cosas.
Mi
hermana no podía ir sola a su habitación o a cualquier habitación de la parte
de arriba ya que tenia mucho miedo; así fuera de día o de noche a ella le daba
miedo, tenia que ir forzosamente acompañada de alguien o que alguien estuviera
ya en alguna de las habitaciones. A la inversa sucedía lo mismo; cuando ya
todos estábamos en nuestra habitación disponiéndonos a dormir, ella no bajaba
por nada del mundo sola; ni aunque fuera alguna emergencia o necesitara algo de
la parte de abajo con urgencia; alguno de nosotros tenia que acompañarla.
Temía
ir sola al patio sola ni de día ni de noche aunque teníamos unas lámparas que aluzaban
bastante bien y no se sentía tan oscuro. Obviamente temía quedarse sola en
casa, tenia que estar alguien con ella, no se podía quedar ni un ratito a
ninguna hora ella sola en casa. Durante algún tiempo nosotros hacíamos burla de
la situación porque simplemente creíamos que exageraba; no era normal.
Tiempo
después lo que fue divertido para mi empezó a ser preocupante, porque me di
cuenta que no era solo una etapa que se quitaría con el tiempo. Así que analice
la situación para ver si podría ayudarla, llegue a la conclusión de que lo
mejor era hablar con ella para intentar comprenderla y así encontrar una
solución o alguna manera de ayudarle. Y así lo hice, me di el tiempo para
charlar con ella… pero fue un rotundo fracaso.
Mi
hermana al final con desesperación y angustia ante mi insistencia me dijo que
no tenia ni la mas remota idea de que era a lo que le temía; solo experimentaba
una profunda sensación de temor que no podía controla. No sabía exactamente que
pasaría, ni siquiera tenia certeza de
que algo pasaría; pero ella tenia miedo. Y lo más preocupante de todo fue con
la frase que termino la conversación… “Pero ya me estoy acostumbrando”.
Desconcertado
y con muchísimas mas dudas que con las que llegue me retire de ahí sin poder
decir una sola palabra. No tenia la mas mínima idea de que podía yo decir o de
como reaccionar ante tal descubrimiento. Era una situación que no tenía alguna
causa. Echaba por tierra lo que yo sabia de que todo efecto tiene una causa; en
esta ocasión no era así.
Reflexione
durante un tiempo aquella situación, incluso algunos días de insomnio se los
dedique a pensar en eso. Jamás llegue a una explicación lógica de que podía
estar pasando en concreto pero lo que si sabía era que tenía que ayudar a mi
hermana a toda costa.
Fue
así como un buen día platique de nuevo con ella:
“Sabes hermanita,
he estado pensando un buen tiempo en tu problema, pero creo que mi error es que
me e enfocado mas a tratar de identificar cual es la causa del problema y no
tanto a encontrarle solución. Considero que no hay nada peor en este mundo que
tener miedo en tu propia casa, esa en la que te refugias cuando hay algún
problema, esa a la que cuando una situación se pone fea lo primero que piensas
es “quisiera estar en casa” o “ya quiero llegar a mi casa”. Porque es el lugar
donde te sientes completamente seguro. Pero cuando tu casa es el lugar en donde
tienes miedo... ¿Dónde te refugias? ¿Donde te sientes seguro? ¿Para donde
puedes correr? ¿Que puedes hacer?
Necesitamos
recuperar ese lugar para ti donde te puedas sentir cómoda, donde puedas andar
sin ninguna preocupación; y yo te voy a ayudar a hacer eso y vamos a platicar
con los demás que viven aquí con nosotros para que también colaboren con esto y
combatamos el problema. Tu sola no puedes hacer mucho pero ya todos será
diferente, podremos lograrlo.
Solo necesito que
tu quieras, necesito que estés convencida y que pongas todo de tu parte para
salir de esto”
Ella
comprendió y dijo que si quería deshacerse de sus temores con ayuda de nosotros
así que comenzamos a trabajar eso. Fue muy difícil al principio porque
regresábamos a la actitud anterior, a la cómoda de no ayudarle a mi hermana y
mejor burlarnos de su situación. Afortunadamente ella quería superar su
problema y se comprometió al 100%, así que
cuando nosotros nos desviábamos ella nos jalaba las riendas “Hey ayúdame
no me dejes sola”. Ahora puedo decir que fue un trabajo arduo de todos pero
logramos superar esa situación. Logramos recuperar ese lugar importante que mi
hermana había perdido y me siento muy orgulloso por ella y por todos nosotros.
Ahora
se preguntaran… ¿A que viene todo esto? ¿Que nos interesa tu hermana o tu? Déjenme
decirles que nos interesa porque lamentablemente es la realidad en la que nos
encontramos, quise ejemplificarlo de una forma mas practica.
Nosotros,
el pueblo, somos como mi hermana. Tememos andar libremente por nuestra casa, en
los medios de comunicación el 90% de las noticias son muertes, asesinatos,
violaciones, atentados, enfrentamientos, secuestros, personas abatidas y todo
esto por el simple hecho de toparse en la calle con las personas equivocadas.
Se escucha que los maleantes andan secuestrando y asesinando personas. Luego en
la siguiente noticia se dice que la policía o el ejército o las autoridades son
las que andan secuestrando y asesinando.
Entonces
mi hermana (pueblo) tiene miedo de todo. No sabe que puede pasar, porque ya de
tantas cosas que pueden ocurrir con el simple hecho de salir a la calle pues ya
nos da miedo todo. Lo peor de todo es que como mi hermana; ya nos estamos
acostumbrando a vivir así.
Por
otro lado tenemos a las otras personas que habitan en la casa a las cuales yo
identifico con las autoridades; ya no hacen más que burlarse de nosotros. Ahora
con el periodo electoral voltean a vernos porque nos necesitan, pero
lamentablemente ya somos muchos los que ya no confiamos en las autoridades. No
importa cual sea el nombre o los colores; necesitamos un hermano que nos diga
“Te vamos a ayudar, me preocupas y juntos vamos a salir adelante”. Necesitamos
recuperar la confianza en las autoridades.
Obviamente
la casa es nuestra querida y hermosa tierra. MEXICO. No queremos subir a las
habitaciones (Estados del Norte), tememos ir al patio (Estados del Sur) y ni
por error o por alguna emergencia queremos bajar a la cocina o a la sala
(Estados del Centro). Nuestra casa ya no nos hace sentirnos seguros ni agusto.
En pocas palabras ya NO es nuestra.
En
conclusión, creo que necesitamos jalar parejo para resolver dicho problema, la
hermana no puede hacerlo sola necesita que los hermanos la ayuden a encarrilarla
y a darle todo el apoyo. Los hermanos no pueden hacer nada si la hermana no se
decide a dejar sus temores atrás y también jalar las riendas de los hermanos
cuando estos desvían el camino.
Por
favor pueblo necesitamos decidirnos a enfrentar nuestros problemas y a pelear
hasta el final para conseguir lo que queremos
Por
favor autoridades ayúdenos a encarrilarnos y hagan que recuperemos la confianza
en ustedes y no solo nos utilicen cuando nos necesiten
Nuestra
casa es la más hermosa del mundo. Como nuestro MEXICO no hay nada mas… vamos a recuperarlo y a hacer que sea la casa
donde estemos seguros y donde estemos agusto.
¡Muchas Gracias!
KHNEMU