"Hacer guardias nocturnas... ¿A quién
se le habrá ocurrido tal tontería? ¿A estas líneas de soporte técnico quien
diablos se va a comunicar en la madrugada?"
"La verdad es que no lo se... pero lo
que me intriga es saber a quién le caemos tan mal que nos envió a nosotras 2
solas a hacer esta guardia"
Ruth y Susana
eran 2 chicas que laboraban en una empresa de soporte telefónico en una empresa
que desarrollaba software para teléfonos móviles. La empresa era aun pequeña,
pero habían tenido gran éxito con un par de aplicaciones que ayudaban a llevar
un control en la alimentación para las personas que querían bajar de peso.
Como parte de
los servicios otorgados por la empresa estaba el soporte técnico telefónico;
como el software había tenido tanta aceptación se planeo abrir el nuevo
servicio de 24/7 para dicha atención a usuarios. Esa noche era el lanzamiento
de dicho servicio así que Ruth y Susana fueron elegidas por ser los elementos más
nuevos dentro de la compañía y por la misma cuestión ellas no pudieron negarse
a tal "Honor" y aceptaron "Gustosas".
La empresa
estaba situada en una casa habilitada como oficina a las afueras de la ciudad,
era de 2 pisos; tenía su cocina y su baño en cada una de las plantas, un
pequeño patio trasero habilitado como comedor y una terraza muy agradable en la
parte de arriba donde salían los empleados a fumar o a despejarse un poco de
las presiones propias de su trabajo. El área de soporte técnico estaba en el
segundo nivel bien distribuida por todo el piso, y tenía un gran ventanal que
daba directamente a la terraza que daba una excelente luz natural al área por
las tardes.
Susy, como era
su costumbre llego ese día a trabajar apenas unos minutos antes después de las 9
de la noche; y Ruth apenas unos 5 minutos antes de la hora de entrada que eran
las 10 de la noche. Ese era el horario establecido de entrada para ese turno y saldrían
el día siguiente a las 8 de la mañana con 2 inútiles y absurdas horas para
comer de 2:30 a 4:30 de la mañana.
Las chicas se
instalaron en su lugar de trabajo muy a su pesar, mentalizadas a hacer lo más
llevadero posible el pesado turno nocturno que les habían asignado solo por ser
las novatas en la empresa.
Todo paso con
relativa normalidad, solo recibieron un par de llamadas cada una entre las 10 y
las 11 de la noche con casos muy simples que resolvieron rápidamente y una que
otra llamada de algún enfiestado que por error marcaba tratando de comunicarse
con algún conocido pero que por su estado de ebriedad no recordaba el número.
Las chicas
trataban de matar el tiempo platicando de trivialidades. Como las 2 eran
elementos nuevos en la empresa, aprovecharon para conocerse más y saber más una
acerca de la vida de la otra. Ruth era una chica irreverente, saco la carrera
por la presión de sus padres porque ella estudiara algo al menos; pero apenas
la término les dejo el papel y se fue a vivir con 2 amigas mas a un
departamento que habían rentado juntas para disfrutar de su independencia.
Susana por otra parte era una chica de su casa, vivía con sus padres y los
apoyaba en lo más que podía, era la clásica hija de familia responsable y
orgullo de la casa. A pesar de ser tan diferentes tenían cierta afinidad, así
que no tardaron en hacerse amigas aun cuando solo habían compartido esas
tranquilas horas.
Después de
platicar un rato cada chica fue a sentarse frente a su computadora. Tuvieron tiempo
para revisar su correo, para jugar en el facebook, para platicar con algún contacto
desvelado que estuviera conectado y para navegar por la red.
Ruth se topo
con uno de los tantos sitios que tiene la infinita internet; el titulo era
bastante intrigante y aunque la chica no era muy amante de las cosas
paranormales, este sitio llamo poderosamente su atención. El website se llamaba
“Top Ten de las Casas Malditas Menos Famosas”. Es bastante ilógico que se
hiciera un top ten de las casas menos famosas, pensó Ruth, siempre se hace este
tipo de listado para casas famosas o de las que todo el mundo habla.
Empezó
a revisar la lista y el titulo no mentía, eran casas en lugares que nadie conocía,
solamente las personas que vivían a los alrededores.
Ruth: Jajajajajajajajaja
Susy: ¿Qué pasa? ¿De qué te ríes?
Ruth: Estoy viendo una página donde aparecen casas malditas que nadie
conoce, y aparece esta casa donde estamos.
Susy: No me digas eso, ¿Qué es lo que dice de la casa?
Ruth: No te asustes, creo que es una de esas páginas de broma en donde toman
tu ubicación y aparece que tú casa esta embrujada o que un asesino ira a
matarte o algo así. Nada de qué preocuparse…
La absurda
hora de comer llego, las chicas bloquearon su computadora y se dirigieron a la
cocina para calentar la respectiva comida que había traído cada una, decidieron
comer en su lugar para poder poner algo de música de fondo y ver el cielo por
el ventanal que daba a la terraza, ya que la luna estaba llena y se veía mas
grande y brillante de lo normal. Era una excelente vista para comer.
Mientras comían
las chicas empezaron a platicar de la situación...
Ruth: "Hacer guardias nocturnas... ¿A quién se le habrá ocurrido tal tontería?
¿A estas líneas de soporte técnico quién diablos se va a comunicar en la
madrugada?"
Susy: "La verdad es que no lo se... pero lo que me intriga es saber a quién
le caemos tan mal que nos envió a nosotras 2 solas a hacer esta guardia"
Ruth: Escuchaste al jefe... "son 2 elementos valiosos y pueden
solucionar los casos solas sin necesidad de que yo este aquí para
supervisarnos" ... jajajajajaja
Susy: Jajajajajaja... "es el primer paso para subir en esta empresa
chicas, deben sentirse orgullosas porque los jefes las están volteando a
ver"...
- Jajajajajajaja
Las chicas seguían con su plática
amena, ya habían terminado de comer y estaban en el proceso de reposar la
comida un rato.
Susy: Oye, ¿Y qué era lo que decía la
pagina esa que estabas viendo hace un rato?
Ruth: ¿Cuál pagina? ¿La de los catálogos de los zapatos?
Susy: No mensa, la de las “casas malditas”
Ruth: No me mensees… porque me la creo.
Susy: Ya pues cuéntame que decía la pagina
Ruth: Pues solo decía que las casas no eran muy conocidas. Esa página la
hicieron un grupo de chavos que se dedican a investigar lo paranormal pero
suspendieron su investigación después de que 2 de ellos desapareció inexplicablemente
al hacer la investigación aquí en esta casa.
Susy: ¡Esas cosas me dan miedo!
Ruth: Ya te dije que esas cosas son solo bromas, no existen solo son tonterías
Susy: Bueno pero cuéntame, ¿Qué decía de la casa?
Ruth: No le puse mucha atención, solo decía algo de una chica que no creía en
fantasmas y que hizo una invocación después de que las retaron sus amigos… o
algo parecido a eso, no recuerdo bien, no tiene importancia.
Las chicas
siguieron platicando de otro tipo de cosas; de banalidades, de chicos, de películas
que habían visto, y de bastantes cosas que hicieron olvidar el tema de la
supuesta casa maldita.
De pronto, el teléfono
de Ruth sonó rompiendo el silencio de la oficina y exaltando un poco a las
chicas que no esperaban que hubiera más llamadas; el reloj decía 3:15 AM ¿Quien
podría necesitar soporte técnico a esa hora?
Se
tranquilizaron un poco después del susto inicial pero no se animaron a
contestar la llamada
Susy: ¿No vas a contestar?
Ruth: Claro que no, estamos en la hora de comida, además lo más seguro es
que sea otro de esos borrachos que se equivocan de teléfono. Déjalo ahorita se
corta la llamada.
El teléfono sonó unas 5 veces y
la llamada termino
Ruth: Vez, te dije que se iba a...
El sonido del teléfono
interrumpió la frase de Ruth, en esta ocasión era el teléfono de Susy el que
sonaba insistentemente; las chicas voltearon a verse una a la otra con un poco
de inquietud y de curiosidad.
Ruth: Contesta Susy, ya despáchalo para que no esté molestando
Susy: ¿Por qué no dejamos que se corte como cuando te marco a ti?
Ruth: Ya van varios timbres y nada, parece que no se va a cansar ahora,
mejor de una vez lo atendemos y que nos deje de molestar
Susy: Bueno va... pero ven conmigo y
le contesto con el altavoz
Ruth y Susy se
acercaron lentamente al lugar donde está el teléfono de esta última. Ella pulso
el botón para responder la llamada con el altavoz y dijo el scrip de siempre
para contestar una llamada.
Susy: Soporte Técnico Buenas Noches le Atiende Susana...
No obtuvo ninguna respuesta, solo
un inquietante silencio se apodero de la oficina
Susy: Bueno, buenas noches...
Ninguna respuesta nuevamente...
Susy: Ruth si no me responde voy a colgar la llamada
Susy: Soporte Técnico Buenas Noches le Atiende Susana...
Y nada...
Ruth: Parece que no era nada después de todo. Mejor ya cuel...
Un sonido
proveniente de la cocina interrumpió a Ruth, fue como si algo hubiera entrado
por la ventana y hubiera caído al suelo, cosa que era imposible ya que las
protecciones de la ventana dejaban huecos muy pequeños y era imposible que
siquiera un gato con toda su agilidad pudiera entrar por ahí.
Las chicas voltearon con dirección
a la puerta de la cocina, como si esperaran que algo saliera de ahí de repente,
cuando de pronto...
Voz: Si bueno...
La voz de una mujer del otro lado
de la línea que hizo dar un grito de miedo a las chicas, ya que no recordaban
que estaba el altavoz activo y habían olvidado la llamada. Susy con mucho miedo
respondió la llamada.
Susy: Buuuenas Noooches... Le
Atiende Susana... ¿En qué puedo Ayudarle?
Voz: Ustedes ya no pueden
ayudarme... ya es demasiado tarde...
La voz de la chica tenía un
enorme pesar... parecía que tenía un terrible dolor del cual no se podía
liberar. Ruth puso el Mute en el teléfono rápidamente y dijo:
Ruth: Escuchaste eso Susy... dijo ustedes, ¿Cómo sabe que no estás nada mas
tu?
Susy: No lo se... debió escuchar el grito de hace un rato o que se yo...
Voz: Se mas de lo que se imaginan chicas…
¿Cómo era posible
que aquella mujer supiera lo que Ruth le comento a Susy si estaba el teléfono en
silencio?
Las chicas
estaban muertas de miedo para este momento, pero ya no podían retroceder, tenían
que seguir adelante para buscar una explicación a lo que estaba sucediendo.
Voz: ¿Que hacen aquí chicas?
Ruth: Estamos de guardia
La ingenuidad de la respuesta de
Ruth era extraña en una chica como ella, pero tan sincera en ese momento que
estaba invadida por el miedo. Aun así seguía en su papel de escéptica y buscaba
una explicación lógica para lo que estaban viviendo
Susy: ¿Quien eres?
Voz: Mi nombre es Fernanda... y solía
ser una chica ingenua como ustedes...
Cada palabra
que provenía de quien ahora sabían se llamaba Fernanda, les erizaba la piel,
era como si una gota de agua helada recorriera su espina dorsal desde la nuca y
hasta la parte baja de su espalda.
Los ruidos de
la cocina empezaron nuevamente, ahora se escuchaba como si algo estuviera
encerrado y tratara de salir, pero que no lo podía hacer. En el altavoz se empezó
a escuchar un ruido como de unos jadeos o una respiración muy fuerte, como si
alguien estuviera muy agitado y tuviera puesta una especie de mascara. Aunque
estos ruidos eran tenues todavía, daba la impresión de que se estaban acercando
lentamente.
Algo extraño empezó
a suceder, de la planta baja de la oficina salían unos espeluznantes ruidos
parecidos a los que provenían del teléfono. Se comenzó a escuchar unos pasos
muy lentos pero muy firmes, eran pasos de mujer ya que se escuchaban unos tacones
muy finos subiendo. Lo extraño era que los ruidos los escuchaban provenientes
del cubo de la escalera y también del teléfono de Susy. . Pronto cayeron en
cuenta las chicas que la llamada provenía de la misma casa.
¡¡¡¡No estaban
solas!!!!
Susy: ¿¿¿Que está pasando aquí???... ¿¿¿Que son esos ruidos???... yo me
quiero ir de aquí
Ruth: No se que sea eso amiga... yo también quiero salir rápido de aquí... ¡¡¡¡¡ya
quiero que esto termine!!!!!
Fernanda: Esto no va a terminar... jamás termina...
No hasta que...
No dijo nada
mas... parecía haberse cortado la llamada. Los pasos de la escalera se
detuvieron justo antes de llegar hasta arriba. Los ruidos de la cocina cesaron.
Una inquietante calma reino en el lugar por un momento.
AAAHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!
Un lastimero
grito de mujer salió del teléfono... Al mismo tiempo la puerta de la cocina se abrió
de un golpe seco… Seguido de los gritos
de terror de ambas chicas...
A la mañana
siguiente al llegar temprano la señora del aseo se encontró con lo que parecía
una espeluznante escena salida de la más terrorífica película de horror.
Los cuerpos de
las 2 chicas yacían en el suelo, inertes y ya sin vida. La expresión de sus
rostros reflejaba el profundo terror que habían experimentado antes de morir.
Rasguños de lo que parecían ser unas enormes garras decoraban el lugar,
acompañados del más hermoso y brillante rojo sangre coloreado gracias a las
inocentes chicas.
Jamás
nadie pudo explicar que había pasado aquella noche de luna llena. La gente
formo la leyenda acerca del lugar que dejo de ser una oficina, ya que todos los
datos y la información de lo ocurrido aquella fatídica noche fueron ocultados
al público.
Lo único que quedo fue la espeluznante grabación
de la llamada que había tenido Susy; donde solo se escucha la macabra risa
burlona de quien fue el que autor de tan macabra obra.